Líder eficaz: el modelo de liderazgo 5E

Mucho depende del líder. Así que si en el equipo hay una persona que muestra las cualidades de un buen líder, el proyecto tiene muchas posibilidades de éxito.

Pero, ¿quién es un buen líder? Ya hemos descrito sus características en esta entrada del blog. Hoy, sin embargo, presentamos el modelo de liderazgo 5E, que ayuda a los líderes a diagnosticar problemas empresariales o a crear un plan estratégico proactivo para evitarlos. Un modelo que sigue siendo relevante hoy en día y que sería ideal para alguien que está a punto de asumir un proyecto.
Del mismo modo, es un modelo con cualidades que ayudarán a cualquier líder a convertirse en el mejor en lo que hace.

ENVISION o dar una visión

Un líder debe tener una visión clara del proyecto y de todas las personas implicadas. No se trata de una competencia fácil, el líder debe ser capaz de identificar hacia dónde nos dirigimos y si queremos llegar hasta allí, cuál es el propósito de nuestras acciones y qué impacto tendrán. A menudo el método SMART por sí solo no basta para describir el objetivo, ocurre que los líderes tardan mucho tiempo en llegar a un consenso.

Una buena forma de comprobar que nuestra visión tiene sentido es contársela a una persona de confianza que esté familiarizada con el tema. A menudo, una conversación de este tipo ayuda a disipar cualquier duda y suele llevar las cosas por el buen camino.

IMPLICARSE

Si un líder se implica realmente en el tema de un proyecto, le resultará mucho más fácil encontrar el equipo adecuado. Además, ese compromiso se percibirá como autenticidad, lo que puede motivar a la gente a actuar. Un buen líder es capaz de integrar al equipo y demostrarles que tienen un objetivo común que merece la pena alcanzar.

HABILITAR o permitir las tareas delegadas

Delegar tareas puede resultar difícil para algunas personas: hay que deshacerse de la creencia de que "yo puedo hacerlo todo mejor". Cuando contrates a personas para que te ayuden, merece la pena depositar tu confianza en ellas y darles la oportunidad de realizar realmente la tarea.
Un buen líder es el que da a su equipo el proverbial margen de maniobra, contribuyendo así a su desarrollo.

ENERGIZAR o motivar

Cuando se trata de un proyecto largo, es natural que la motivación falte en algún momento: habrá aburrimiento, cansancio o problemas externos. Un buen líder debe anticipar y prevenir estas situaciones: debe alimentar la energía del equipo y demostrarles que la visión sigue mereciendo la pena.

EJECUTAR - dar los últimos toques a todo

Para completar un proyecto, se necesita un plan de acción eficaz y estratégico, y los recursos adecuados, incluido, por supuesto, un equipo de personas. Un buen líder tiene un claro sentido del propósito, es capaz de ver todo el proyecto desde arriba y puede asegurarse de que todo funciona como debe.

Ser líder no es tarea fácil. Antes de asumir ese papel, vale la pena hacerse algunas preguntas:

• ¿Tengo una visión clara del proyecto?
• ¿Tengo capacidad para comprometerme?
• ¿Tengo la energía necesaria para motivar a la gente a trabajar?
• ¿Cómo puedo desarrollar a esas personas?

Un papel de liderazgo en un equipo conlleva muchos sacrificios, pero ver que un proyecto llega a buen puerto y saber cómo se ha desarrollado tu equipo es extremadamente gratificante y a menudo recompensa cualquier dificultad.